Un vino del Priorato (Tarragona), el Clos Erasmus del 2004, tocó el cielo en el 2007 al obtener la puntuación máxima, 100 puntos, en la lista del gurú Robert Parker, mientras que otros tres obtuvieron 99 y 98 puntos. Este año repite éxito en la prestigiosa lista el Clos Erasmus del 2005 y otros seis consiguen 99 y 98 puntos, lo que confirma a la denominación de origen trarraconense como la meca mundial del vino. Junto al tinto de Daphne Glorian repite en lo más alto de la clasificación el Contador 2005, que mantiene a La Rioja como buque insignia del país.
Pese a la pérdida de tres referencias españolas con la etiqueta 100 respecto a la lista del año pasado, el resultado sigue siendo extraordinario. Hasta hace 12 meses, ningún vino español había logrado la máximá punturación, y los que más se habían acercado se podían contar con los dedos de una mano. Ahora, son 21 los que cuentan con 99 y 98 puntos (el año pasado fueron 10 vinos).
Rozando el cielo, con 99 puntos, se ha clasificado, se ha clasificado Espectacle 2004. Este tinto pertenece a la denominación de origen Montsant, que está ganando enteros en los últimos años entre y que ha sido elaborado por socios apasionados por el vino (René e Isabel Barbier, Fernado y Marta Zamora, y Christopher y Charlotte Cannan), en una prcela con forma de antiteatro.
También con 99 puntos aparecen el Pingus del 2005 (este Ribera del Duero había conseguido los 100 puntos en la añada del 22004), el Vega Sicilia Reserva Especial y el Pedro Ximénez Barquero Solera 1905 (excepcional vino de sacristía cordobés de la D.O Montilla-Moriles).
Capítulo aparte merece el Mas-Gil Clos d,Agon del 2006, que se ha convertido en el mejor blanco español que jamás ha tenido la lista de Parker. Ha logrado 95 puntos. Perteneciente a la D.O Cataluña (se hace en Calonge, en Gerona). Esta bodega de cinco apasionados suizos ha contado con el asesoramiento de Peter Sissek, alma máter de Pingus y una de las voces que gozan de más respeto en la actualidad. Este blanco está elaborado con un ensamblaje de uvas inédito en España: viognier, roussanne y marsanne.
La transcendencia del baremo de Parker es tan grande que dispara la cotización de una botella si le otorga un 100. Así, puede doblar el precio y superar los 500 euros, y agotar las existencias. Las peticiones de compra llegan de todo el mundo, sobre todo de Estados Unidos y Asia, grandes consumidores de los vinos que puntúa el gurú.
